No soy de esas personas que sólo se valoran en la medida en que alguien les ama y cuando les dejan todo su mundo se desmorona. Soy más de esas personas que se torpedean conformándose ante sus defectos, dejándose llevar por sus desgracias y descuidando sus virtudes.
Sí. De esas personas que cuando han perdido todo lo que consideraban importante, miran con desdén la suma de sus malas decisiones que dieron lugar a errores y que ahora, desgraciadamente, no pueden deshacerse.
Sin embargo, no puedo evitar que me de asco la gente perfecta y feliz o perfectamente feliz. No se trata de estar amargada. Creo que los que son totalmente felices es porque no tienen capacidad de interiorización, de pensamiento, de reflexión. Odio sentir que siendo guapa y tonta se es más feliz. Siempre te ríes de esa gente que no sabe ni hablar y que va de cama en cama o que se preocupa por cosas absurdas, que no tienen ni un poco de cultura y se regodean en su ignorancia. Pero la verdad, los observas y que felices son... con sus coches tuneados, salir de fiesta, beber, liarse con unos y con otros o creer que conocen el amor porque se llaman bebe...
qué saben del amor... NADA. Yo lo he conocido y sé lo que es. El amor es vértigo, es volar, es creerse capaz de todo, es querer que pase el tiempo y que lleguen cosas que has soñado y a la vez querer pararlo en cada instante precioso, querer envejecer, pensar en compromisos que ni te habías planteado, que el mejor plan sea ver una película o hacer la compra. El amor es conocerse de otra manera, conocer los limites o lo ilimitado de tus sentimientos. Qué sabrán los de hmyv del amor o qué saben del amor esas mujeres que van buscando dinero o fama y por eso venden su alma, qué sabrán del amor esas personas que están con cualquiera sólo por no estar solas, dejando escapar la oportunidad de sentir lo más bonito que hay.
El amor es lo único que me hace pensar que soy afortunada de no ser vana y superficial, de ser reflexiva y de entender lo que significa querer a alguien.
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